El Pleno de la Cámara de Diputados aprobó en lo general la Ley de Austeridad Republicana con 321 votos a favor, una abstención y 124 votos en contra.
Con esta ley se pretende fortalecer la coordinación de acciones financieras entre entes públicos de la administración pública federal, facultando a la Secretaría de Hacienda para crear nuevos fideicomisos y mandatos.
Además, la legislación duplica de cinco a diez años el tiempo que un exfuncionario público de alto nivel puede trabajar en empresas privadas luego de dejar su cargo.
La ley establece que los servidores públicos se sujetarán a la remuneración adecuada y proporcional que conforme a sus responsabilidades se determinen en los presupuestos y es “una herramienta más para combatir la corrupción, servir al pueblo y no a los grupos de interés económico”, aseveró Mario Delgado Carrillo, coordinador parlamentario de Morena.
Plantea que sea de interés público regular y normar las medidas de austeridad que se haga en el ejercicio del gasto público federal para que los recursos económicos con los que cuente el Estado sean administrados con eficacia, eficiencia, economía, transparencia honradez.