La ciudad de Chengdu planea iluminarse con una luna artificial en 2020. Se trata de un satélite que iluminará un área de 10 a 80 kilómetros, con un brillo ocho veces mayor al de la Luna. Kang Weiming, director del Instituto de Tecnología de Harbin, en China, explicó que la luz del satélite artificial será similar al resplandor de un atardecer, por lo que no afectará las rutinas de los animales.