Enero es uno de los meses más complicados para la economía familiar. Luego de los gastos decembrinos y del Día de Reyes, ¿sabes cómo sobrevivir la cuesta de enero?
Muchos mexicanos ven como opción las casas de empeño, pero hay que tener mucho cuidado porque la mayoría son empresas privadas cuyo único objetivo es el lucro, es decir, buscan hacer negocios y sacar provecho de tu situación.
Y no sólo eso, también hay muchas que no están registradas ante la Procuraduría Federal del Consumidor, lo que implica que no se ajustan a ninguna regulación, por lo que hay casos graves de usura.
En México existen dos tipos de casa de empeño:
Las empresas privadas mercantiles, que deben estar registradas ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
Además están las instituciones de asistencia privada (IAP), que no tienen fines de lucro, como el Nacional Monte de Piedad, Montepío Luz Saviñón y la Fundación Rafael Dondé, entre otras.
Datos recientes indican que en esta temporada se ha incrementado la demanda de los servicios de casas de empeño hasta 15 por ciento.
Pero en febrero y marzo el empeño se incrementa de manera considerable porque la gente ya no tiene reservas económicas y su única salida es empeñar sus electrodomésticos, joyas y hasta autos.
Cifras de la Asociación Mexicana de Empresas de Servicios Prendarios indican que cada año cerca de 10 millones de pignorantes acuden con sus agremiados para financiar sus gastos diarios. Situación que se agrava porque de acuerdo con la Asociación Nacional de Casas de Empeño, en México existen 40 millones de personas que no cuentan con acceso a un crédito bancario.
Lo que pocos saben es que las casas de empeño cobran tasas de interés promedio de hasta 7 por ciento mensual y algunas hasta 11.5 por ciento, lo que implica que los pignorantes pagarán entre 84 por ciento y 138 por ciento anual, además hay que sumar las comisiones, avalúos y seguros, por lo que el Costo Anual Total (CAT) supera 300 por ciento.
Debes saber que la diferencia entre las casas de empeño mercantiles y las IAP es la forma en que se puede liquidar el préstamo de acuerdo con los días que permanece la prenda bajo su custodia.
Antes de ir a una casa de empeño para sobrevivir la cuesta de enero ten en cuenta lo siguiente:
- Verifica si contarás con recursos para recuperar la prenda
- Antes de decidir en qué establecimiento se empeñará, busca una institución confiable (que no vaya a desaparecer mañana) y compara la valuación y condiciones entre instituciones, pueden existir diferencias significativas entre las valuaciones
- Utiliza el CAT como medio para comparar entre una casa de empeño comercial y otra; sin olvidar si este monto incluye o no el IVA
- Hay que confirmar que las tarifas se exhiban en pesos mexicanos
- Si tienes dudas, pregunta por los conceptos que no queden claros
- Hay que preguntar hasta cuántos refrendos (renovaciones del contrato) se pueden hacer y el pazo para recuperar las prendas
- Si no te cumplen se puede acudir a las oficinas de la Profeco
Una vez que empezó el año, vendrán gastos que tendrás que afrontar, como los pagos de impuestos anuales, alzas en precios y tarifas del gobierno, alzas en transporte y muchos más.
10 consejos para sobrevivir a la cuesta de enero:
1.- Realiza un listado de todos tus gastos, empieza por las obligaciones ineludibles y termina con los superfluos
2.- Realiza un listado de tus ingresos
3.- Apriétate el cinturón. Si tus ingresos son menores a tus gastos debes recortar algunos conceptos. Puedes comer en casa, llevar comida a la oficina o buscar que algún amigo te dé aventón al trabajo. Tal vez también tengas que dejar de ir al cine o a algunos espectáculos
4.- No dejes de cumplir con tus deudas bancarias o pagar impuestos
5.- Nunca recurras a la tarjeta de crédito para pagar otra
6.- Consolida tus deudas en una sola tarjeta. Negocia con el banco que cobra menores tasas de interés y pasa todas tus deudas a éste
7.- Evita los centros comerciales para no caer en la tentación de las ofertas o rebajas
8.- Si a pesar de reducir los gastos no te alcanza para los pagos más elementales, busca un empleo adicional
9.- Acude a una casa de empeño, pero analiza la mejor opción y tus posibilidades de pago
10.- En última instancia solicita un crédito personal o de nómina. Considera que los pagos son de mediano plazo y con tasas de interés altas
Recuerda siempre incluir entre tus propósitos de año nuevo cuidar tus finanzas y ahorrar al menos el 10 por ciento de tus ingresos, eso te dará una gran tranquilidad y no volverás a padecer las cuestas de enero.