Con la ausencia del presidente estadounidense Donald Trump, líderes del mundo trataron de dar un impulso al amenazado multilateralismo con un foro en París.
La canciller alemana, Angela Merkel, abrió el Foro de París por la Paz a la misma hora en que Donald Trump rindió homenaje en el cementerio de Suresnes a los caídos estadounidenses en la Primera Guerra Mundial.
Emmanuel Macron, presidente francés, pretendió convertir la conmemoración del armisticio de 1918 en una batalla contra los peligros del nacionalismo y del repliegue identitario, en lo que tuvo el respaldo de Alemania y Rusia, cuyo presidente Vladimir Putin no tomó la palabra en el foro.