La práctica del sexo ha servido para crear o para solucionar guerras en la historia del hombre, pero en esta era de la tecnología, en esta época de los millennials las cosas han cambiado. Múltiples estudios indican que los llamados millennials prefieren sacrificar el sentido del olfato, sexo o su información personal, con tal de usar su smartphone y mantener conexión wifi.
Esta generación no ve el sexo como algo prioritario, ellos buscan sentirse libres en cuerpo y alma, viajar, conocer, disfrutar de su tiempo para ser felices, por tanto la intimidad y las relaciones personales pasan a segundo término.
Sin embargo, para ellos la sociedad es tan permisiva que ofrece las condiciones óptimas para disfrutar plenamente de la sexualidad, como información de manera ilimitada, padres que permiten traer novios o amigos a dormir a casa, y hasta acompañan a sus hijas al ginecólogo para que les recete el método anticonceptivo más apto para ellas, finalmente, estas acciones han provocado que los jóvenes pierdan la curiosidad de experimentar el amor bajo las sábanas.
Los millennials son una sociedad que busca sus relaciones en las redes sociales, quieren a una persona que comparta sus mismos gustos o pensamientos, pero si no lo hacen se dan por vencidos muy rápido y ni pareja ni sexo ni nada.
Relaciones sexuales casuales
La Gaceta UNAM publicó recientemente un artículo de Fouilloux y Barragán, del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina, realizado entre estudiantes universitarios. El análisis indica que los mexicanos reportaron haber tenido relaciones sexuales casuales y/o abiertas en las que no hay necesariamente una relación de noviazgo ni exclusividad.
Además, todos los que participaron en el trabajo mencionaron que es mediante redes sociales (WhatsApp, Facebook) que inician o terminan las relaciones, o acuerdan encuentros sexuales. A veces sólo basta el mensaje: “yo quiero, tú quieres, va”.
Para los millennials no es fundamental el amor, el enamoramiento ni tener novio o novia para tener relaciones sexuales. “El amor, indicó Barragán, nunca ha sido un requisito para vivir una sexualidad plena y satisfactoria. En las generaciones pasadas estaba en el discurso, pero en los millennials entrevistados ya no, pero sí hablan de que les gustaría enamorarse”.
Un estudio de la Universidad de San Diego reveló que esta generación no tiene en la lista de sus prioridades el sexo.
Otras investigaciones afirman que estos jóvenes adultos no pueden establecer relaciones duraderas, ya que se resignan muy rápido a no tener sexo ni pareja estable.
Deseo sin presión social
“Los jóvenes millennials están más dispuestos a los contactos diversos, se dejan llevar por el deseo, las ganas, la inquietud por saber qué pasa con sus capacidades para seducir y visibilizar sus cuerpos. El deseo no está influido por la presión social de que por ser joven debe ser alto. Por el contrario, ellos valoran y defienden el deseo sexual personal. Y aún la falta de atracción sexual en las relaciones (jóvenes asexuales) es considerada una manera de orientación que nos les trae conflicto”, asegura el doctor Walter Ghedin, médico psiquiatra y sexólogo, a un medio digital argentino.
Por otra parte, una investigación de la Universidad de San Diego dio a conocer que la generación digital prefiere tener menos sexo que las anteriores.
Afirma que un millennial tendrá una media de 8 parejas durante toda su vida, mientras que los que hoy tienen 70 años tenían al menos 11 parejas.
El estudio apunta que los jóvenes actualmente prefieren compartirse fotos y videos sexuales en vez de tener sexo o buscar el contacto físico con otras personas.
Pero como menciona el estudio de la UNAM, son justamente las redes sociales las que les abren las posibilidades de tener sexo.
Sólo tienen que decir, vía WhatsApp, “yo quiero, tú quieres, va”.
