Septiembre siempre ha tenido un enorme significado para los mexicanos, es el mes y en particular el 15 y 16 las fechas más importante para nuestro país, se celebra, la Independencia de México, las fiestas patrias, la noche mexicana; se enaltece el patriotismo, se exacerba la alegría, el sabor y el color de México, con su tradicional música mexicana del mariachi, sus características bebidas conocidas en todo el mundo como el mezcal y su carta de presentación el tequila mexicano y qué tal sus ricos y platillos típicos como el pozole, los chiles en Nogada, los panbazos, las tostadas y muchos otros platillos más en la rica y variada cocina de México considerada patrimonio de la humanidad. Y para cerrar con broche de oro, el tradicional grito de independencia, que cada 15 de septiembre alrededor de las 11 de la noche el presidente en turno desde el balcón de Palacio Nacional, lanza sus vivas a los héroes de la patria(últimamente muy distorsionados) para culminar con las ¡Vivas a México!
y finalmente el espectáculo de cohetes ( que no tardan en desaparecer, por los protectores de animales) y después de todo el “bailongo” pero, pero, pero, Septiembre mes de SISMOS!
Si, septiembre también ya se asocia con terremotos, preocupación, destrucción y muerte, son varios los sismos de alta magnitud que se han dado en septiembre, en diferentes días del mes, en particular el 19 de septiembre, que tienen a la población preocupada, porque después del grito de alegría( el 15), hemos tenido el grito de dolor, tanto que los simulacros para prevenir a la población ya se implementaron, todos los 19 de septiembre.
¿Que nos queda? Adaptar nuestra vida a esta nueva circunstancia y aprender de la cultura de la prevención, en la medida de lo posible, tomar todas las precauciones para que los terremotos no trastoquen nuestras vidas.
