Donald Trump advirtió a China que si no llega a un acuerdo comercial con Estados Unidos ahora, les resultará “mucho peor” negociar otro tratado en un eventual segundo mandato bajo su cargo.
Así Trump trata de transmitir una imagen positiva al estrepitoso fracaso de recientes negociaciones que han tenido las dos potencias comerciales para acabar con la guerra arancelaria en la que se encuentran envueltas.
En el resultado de las conversaciones, tuvo que ver el anuncio hecho el mismo viernes por Trump de elevar al 25 por ciento los aranceles a la importación de productos chinos por un valor de 300 000 millones de dólares.
Medida que se suma a otras que puso en marcha recientemente para incrementar del 10 por ciento al 25 por ciento los aranceles sobre 200 000 millones de dólares de bienes chinos. Antes, China solamente pagaba 25 por ciento por 50 000 millones de dólares en alta tecnología.
Incluso Trum dijo:
Creo que China sintió que estaban siendo golpeados tan duramente en la reciente negociación que podrían esperar a las próximas elecciones, en 2020, para ver si tienen suerte y gana un demócrata, en cuyo caso continuarían estafando a Estados Unidos por 500 mil millones … el único problema es que saben que voy a ganar y el acuerdo será mucho peor para ellos”
Ahora el mandatario estadounidense asegura que están justo donde desean estar con China, y que van a tomar decenas de miles de millones de dólares en aranceles “estamos justo donde queremos estar con China. Recuerden, rompieron el trato con nosotros y trataron de renegociar. Vamos a tomar decenas de miles de millones de dólares en aranceles de China.
Pero las decisiones de Donald Trump tienen repercusiones en todo el mundo, la reacción inicial de los mercados a las amenazas de aranceles más altos causó una de las peores semanas de las bolsas de valores, incluso el Dow Jones cayó hasta 471 puntos en un día.
Si la guerra comercial se intensifica, los activos más seguros, como la deuda pública, el oro, el franco suizo y el yen, se convertirán en los lugares de refugio para las inversiones.
Las consecuencias son insospechadas y los inversionistas están nerviosos,
pero sin duda consumidores estadounidenses sufrirán las consecuencias de las medidas de Donald Trump.
