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Voto 2019, con fecha de caducidad

Este 2019 habrá elecciones en seis estados, entre las que destacan las de Puebla y Baja California porque renovarán gubernatura.

Por lo tanto, en Aguascalientes se elegirán 11 alcaldías; en Baja California un gobernador, cinco alcaldías y 25 diputaciones; Durango 39 alcaldías; en Quintana Roo 25 diputaciones y en Tamaulipas 36 diputaciones.

Voto 2019, con fecha de caducidad
La esperanza está en las urnas

Los mexicanos quieren un cambio, su esperanza está en las urnas, se sienten con el poder de cambiar el rumbo del país, sin embargo no hay ninguna garantía de ello.

El poder de los ciudadanos está en su voto, pero éste tiene fecha de caducidad, porque luego de las elecciones, empieza el poder de los políticos ganadores.

Los políticos son los mismos, ayer estuvieron en un partido, hoy en otro, mañana quién sabe. En realidad los partidos y su forma de operar es la misma, saben que la democracia simulada es un enorme negocio y después de los comicios se desentienden de los votantes.

A votar por el menos malo

La gente no vota por el mejor, vota por el menos malo.

Así ha sido por décadas, por eso la ciudadanía está enojada, está harta de la clase política.

La población desconfía del PRI. Sexenio tras sexenio les falló.

En los gobiernos priistas sin duda hubo desarrollo y crecimiento, pero también aumentaron la marginación, la pobreza, la corrupción y la inseguridad.

El PRD, que en algún momento surgió como la mejor opción de izquierda, está en franca decadencia. Los votantes lo han castigado duramente por sus errores; en cuanto llegó al poder surgieron escándalos de corrupción, ineficiencias y malas prácticas de gobierno.

El PAN, con los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón se volvió la gran decepción para los mexicanos.

Con ellos nunca llegó el cambio que todos esperaban, México tenía más de lo mismo. El crecimiento y la estabilidad económica de México no lograron mejorar el nivel de vida de sus habitantes y dejaron al país con 60 millones de mexicanos en la pobreza por ingresos.

Después de la elección viene el poder de los políticos

Arrasa la imagen de AMLO

Pero llegó Morena, con una arrasadora imagen encabezada por Andrés Manuel López Obrador (AMLO), quien le dio al Movimiento de Regeneración Nacional tantos votos que ni los mismos líderes imaginaron.

Esa misma imagen es la que tiene a Morena en el umbral del triunfo en Puebla y Baja California.

Después de 30 años y cinco gobiernos panistas emanados de las urnas, Acción Nacional es muy probable que pierda su joya de la corona, el gobierno de Baja California.

Pero para Acción Nacional es más que una derrota, ya que Baja California fue la primera gubernatura no solamente del PAN, sino de la oposición que siempre había sido arrollada por la maquinaria priista.

En esos 30 años gobernaron Ernesto Ruffo, Héctor Terán, Alejandro González Alcocer (interino y sustituto), Eugenio Elorduy, José Guadalupe Osuna y Francisco Vega, todos de extracción panista.

El PRI perdió su hegemonía en Puebla hace algunos años. Como en muchos casos, aprendió a estar cerca del erario pero lejos del pueblo.

Desde 2011 los priistas le “cedieron” el gobierno al PAN.

Después de muchos errores, el PAN se encuentra dividido. Un dato que refleja la catástrofe panista es que en las elecciones extraordinarias de este 2019 lleva como candidato al gobierno del estado a un académico, Enrique Cárdenas Sánchez, quien no es panista y ha coqueteado con Morena.

Para Morena la situación es más que alentadora, todo apunta que la fuerza personal de AMLO es suficiente para desplazar al PAN de Puebla y que el panismo bajacaliforniano cierre ya un ciclo de 30 años de poder estatal ininterrumpido.

El poder político de Morena

Morena, de ganar en Puebla y Baja California, tendría siete gubernaturas, cientos de presidencias municipales y sería primera fuerza en 23 congresos locales. En cambio, el PAN pasaría de 12 a 10 gubernaturas, mientras que el PRI se quedaría con 12, pero con el riesgo de perder la mayoría en los próximos tres o cuatro años.

En los seis procesos electorales votarían hasta 13.5 millones de mexicanos para elegir a 148 cargos en conjunto, que incluyen dos gobernadores en los casos de Puebla y Baja California, así como diputados, alcaldes y regidores. Se instalarán 23 mil 406 casillas.

Pero los comicios, con semblante democrático, es algo en lo que pocos creen. Encuestas recientes indican que ocho de cada diez mexicanos dice tener “poca” o “nada” de confianza en los partidos políticos.

Sin duda el poder de los mexicanos está en las urnas, pero todo apunta a que es un poder que tiene fecha de caducidad, porque luego del cierre de las casillas electorales, empieza el poder de los políticos.

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